Por: Lic. Fernando Núñez
Bachelof of US Legal Studies in Inmigration
En el año 2012 el presidente Barack Obama, sus asesores y directores del censo nacional de inmigración anunciaban una vez más un apróximado de 12 millones de ilegales e indocumentados que viven “en la oscuridad o sombra”, por decir ocultos.
La preocupación para cualquier gobierno es tener dentro de la población personas cuya identificación y comportamiento en sus paises de origenes sean desconocidos, hasta ahí vamos bién, logicaménte, Estados Unidos es el país con más enemigos en el planeta tierra por las políticas y medidas que históticamente ejecutan hacia afuera: un sin numero de paises intervenidos, combates atroces, medidas ejecutorias, prohibiciones, sanciones y represiones, los cuales siempre justifican.
Los inmigrantes ilegales e indocumentados y su forma de entrar a ese país representan el peligro más eminente en la actualidad; sin registro de entrada I-94 ni huellas no hay forma de saber quién es tu vecino, por tanto, es un mal que puede convertirse en un alto peligro en cualquier momento, por donde entra un ciudadano sin record criminal puede entrar un delincuente o terrorista.
Sin embargo, este mal es pasado por alto al momento de identificar el valor que tienen los indocumentados e ilegales para el país, estos realizan los trabajos que ningún legal hace por debajo del costo real, haciendo más ricos a los ricos. Otro aspecto es el dinamismo de la economía, moviendo millones de dólares semanales en efectivo, pues sus cobros nunca pueden ser en cheques.
Pero el aspecto que evaluamos de manera personal es el significado en las entradas económicas directas al Gobierno Federal a través de inmigración, el MVA y algunas otras agencias.
Por lo pronto, sabiendo el Gobierno que estos significan un mal y que han violado las leyes, no se atreven a ejercer una medida drástica que elimine esta práctica y saque del país a los que ya están viviendo allí, o presentar una amnistía que le brinde estatus legal, siendo la última registrada y ejecutada en 1986 por el presidente Reagan.
Es simple, cuando el gobierno desea reunir millones de dólares en pocas horas y en servicios, solo con gastos operacionales, la estrategia es asustarlos con persecuciones, redadas y capturas para luego del susto inventar medidas y anunciar algunas administrativas o extensiones de permisos en favor de ellos, quienes a seguidas invierten sus ahorros en los procesos que anuncie el gobierno en su favor.
Una de estas medidas por ejemplo, es otorgar licencias de conducir a ilegales, extender el TPS a salvadoreños, brindar asilo con poco control de examinación de antecedentes, bajar años a procesos, emitir medidas en favor para que soliciten waivers estando ilegal, entre otras más.
La inmigracìon y permanencia ilegal es un mal que genera millones de dólares al Gobierno americano, de manera increíble es un gran negocio que ningún Gobierno erradicará, no combatirá de manera decidida, hay males que son necesarios y este, a nuestro entender es uno de ellos.
