Por: Juan Belén
Una amenaza nacida en la prisión
Desde las entrañas de Tocorón, una de las cárceles más peligrosas de Venezuela, nació el Tren de Aragua, un grupo criminal que ha trascendido las rejas para convertirse en una de las organizaciones delictivas más temidas de América Latina. Lo que comenzó como una banda dedicada a controlar el penal terminó transformándose en una maquinaria criminal con presencia en Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Brasil.
La brutalidad de sus operaciones, que incluyen tráfico de drogas, extorsión, sicariato y trata de personas, ha puesto en alerta a las autoridades de varios países. Sin embargo, la amenaza ya no es solo regional. En Estados Unidos, líderes políticos han comenzado a mencionar al Tren de Aragua como un nuevo enemigo en la lucha contra el crimen transnacional.
Origen y expansión del Tren de Aragua
El Tren de Aragua surgió en el estado de Aragua, Venezuela, dentro de la prisión de Tocorón, donde los propios reclusos impusieron su ley ante la debilidad del sistema penitenciario venezolano. Inicialmente, la banda se dedicaba a controlar el tráfico de drogas y la extorsión dentro del penal. Sin embargo, su poder creció a tal punto que sus líderes extendieron sus operaciones más allá de la prisión.
Aprovechando la crisis económica y la falta de control estatal en Venezuela, el Tren de Aragua evolucionó hasta convertirse en una red criminal bien organizada con alcance internacional. Actualmente, sus tentáculos se extienden a múltiples países de América Latina, operando como un cártel altamente estructurado.

Un imperio basado en la violencia y el crimen
La estructura del Tren de Aragua se asemeja a la de los grandes grupos criminales. No es una pandilla callejera desorganizada, sino una organización con disciplina, jerarquía y códigos internos estrictos. Entre sus principales actividades delictivas se encuentran:
- Extorsión: Comerciantes, transportistas y migrantes son blanco de cobros ilegales. En muchos casos, quienes se niegan a pagar son ejecutados.
- Tráfico de drogas y armas: Controlan rutas de narcotráfico y comercialización de armamento en varias regiones de Sudamérica.
- Trata de personas: Se les ha vinculado con redes de explotación sexual y trabajo forzado.
- Sicariato: Utilizan el asesinato selectivo para mantener su control y expandir su territorio.
En países como Perú y Chile, la presencia del Tren de Aragua ha generado un incremento en los índices de violencia. En Lima, por ejemplo, se han reportado casos de secuestros y extorsiones con la firma de la banda.
La expansión que preocupa a Estados Unidos
El impacto del Tren de Aragua ha cruzado fronteras y ya no es solo un problema latinoamericano. En Estados Unidos, el expresidente Donald Trump y otros líderes conservadores han mencionado a la banda en sus discursos, utilizándola como un símbolo de los peligros asociados con la migración descontrolada y el crimen organizado.
La narrativa política ha señalado que miembros del Tren de Aragua han ingresado a EE.UU. a través de la frontera sur, lo que ha intensificado los llamados a endurecer las políticas migratorias y reforzar las deportaciones.
Además, en círculos diplomáticos se ha planteado una posible cooperación con El Salvador, donde el presidente Nayib Bukele ha implementado una política de mano dura contra las pandillas. Algunos sectores han sugerido que miembros del Tren de Aragua podrían ser encarcelados en las prisiones salvadoreñas, conocidas por sus condiciones extremas y su férreo control sobre los reclusos.

¿Se puede frenar al Tren de Aragua?
El crecimiento del Tren de Aragua representa un desafío complejo para las fuerzas de seguridad en América Latina. A pesar de operativos en distintos países que han llevado a la captura de algunos de sus líderes, la organización sigue adaptándose y expandiéndose.
Combatir su influencia requiere cooperación internacional, inversión en seguridad y un endurecimiento de las leyes contra el crimen organizado. Mientras tanto, la banda sigue operando, sembrando terror y consolidando su poder en la región.
La gran pregunta es: ¿hasta dónde llegará el Tren de Aragua antes de que alguien logre detenerlo?

Lic. Juan Belén
Experto en Asuntos Internacionales
