Opiniones

No llueve mal, llueve peor

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Que penoso es observar el mismo escenario otra vez. La tormenta Laura, ha evidenciado nuevamente las condiciones de pobreza extrema en que viven la mayoría de los dominicanos. No obstante, el muy promocionado crecimiento economico durante años.

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Ríos y cañadas desbordados, casuchas y mobiliarios destruidos, calles, avenidas inundadas de agua, árboles caídos; extensas siembras de productos agricolas, vidas de animales y principalmente humanas, que se pierden. Un escenario, que se repite en cada ocasión que acontece un fenómeno natural.

Los gobiernos, improvisan ejecutando programas de emergencias que olvidan en poco tiempo. Quedando muchos los desahuciados sin protección.

Siempre me he preguntado ¿Cuál es la utilidad de los elevados, tuneles, teleférico horrizontal, circunvalaciones; avenidas suntuarias, elegantes puentes, etc? No han sido capaces de mejorar el desorden del tránsito e igualmente, contrarrestar los efectos de Covid-19, la limitación en la producción, el desempleo, prostitución; delincuencia e inseguridad ciudadana
y otros problemas que inciden en que los gobiernos, no cumplan con los derechos fundamentales de las personas establecidos en la Constitución y las Leyes.

En mi opinión, esa rigidez de las autoridades gubernamentales en invertir en obras de crecimiento físico urbano, tienen dos productos:

a).-ofrecer una visión de falso progreso, y

b).- construir ruedas cuadradas que obstaculizan el logro del desarrollo.

Los desechos humanos, aguas industriales, agropecuaria, mineras; etc sin tratamientos, llegan contaminando a las aguas subterráneas, ríos y mares, en un país en el que el turismo representa uno de sus principales sectores. Disponemos de un país muy elegante por arriba y pudriendo por debajo.

Es costumbre de las autoridades, gubernamentales invertir en obras que se construyan en el corto plazo, y que se vean para poder inagurarlas. Las obras que no tienen estas condiciones, por importantes que sean, no se realizan.

Por estos errados criterios es que no se ejecutan, por décadas, programas de saneamiento como:

a).- Alcantarillado
sanitario
b).- Alcantarillado
pluvial
c).- Plantas de
Tratamientos
d).- Saneamientos
de cañadas,
ríos y mares,
arroyos
e).- Limpieza;
canales de riego,
imbornales,
desagües de
aguas
f).- construcción de;
pequeñas y
medianas
presas,
sistemas de regadíos,
viviendas de bajo costos
caminos vecinales
reforestación, etc.

En espera, de que el plan plurianual qué elabora el nuevo gobierno, tome consideración que el agua, y el saneamiento además, de ser derechos humanos, constituyen tambien ejes del desarrollo sostenible.

Fuente:El Nuevo Diario

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