SANTO DOMINGO.- Los fiscales que se encontraban en la audiencia de la Operación Calamar este viernes, confirmaron que el diputado por la circunscripción 3 del Distrito Nacional, Sergio Moya, será uno de los imputados en el caso de presunta corrupción que dejó detenidos a varios exfuncionarios del gobierno de Danilo Medina.
La confirmación hecha a un periodista del Listín Diario establece que el congresista, mejor conocido como Gory, fue señalado por unas cuatro personas como uno de los jefes del apartado dedicado al cobro irregular a bancas de lotería.
Sin embargo, el jueves el legislador señalado negó las imputaciones en su contra y dijo que nunca ha recibido un peso de forma irregular del Estado dominicano y también indicó que nunca ha presionado o cobrado a ningún dueño de bancas de lotería para que le den dinero.
Al tomar un turno de ponencia en el hemiciclo, Moya anunció que está dispuesto a renunciar a su condición de legislador si la justicia le prueba «las mentiras infundadas» que pesan en su contra.
El diputado asistió a la sesión de la Cámara Baja para afirmar que existe «una campaña masiva de mentiras» que supuestamente está dirigida por algún sector para hacerle daño político.
Según el diputado representante del Distrito Nacional, «no existe ni existirá» ningún dueño de bancas de lotería que demuestre que él pertenece a alguna mafia de cobros ilegales, como argumenta el Ministerio Público y agregó que nunca ha cobrado montos para la estructura de supuesta corrupción que sustentan los fiscales.
En ese sentido, expresó que no permitirá «bajo ninguna circunstancia» que continúen difamándolo y detalló que lleva más de 32 años, sin interrupción, en el negocio de las bancas deportivas y alrededor de siete en la vida política activa.
«Que quede claro que yo creo en el sistema de justicia dominicano y en el rol del Ministerio Público, porque el que nada debe, nada teme», sostuvo el diputado en ese entonces.
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