El Partido Social Demócrata rumano, que lidera el Gobierno de coalición, ha acusado a la Unión Europea (UE) de discriminación por mantener la vigilancia sobre la corrupción y la justicia en el país, justo cuando está a punto de asumir la presidencia de turno del club comunitario.
“Rumanía no aceptará ser tratado como un país de segunda clase”, declaró el domingo Liviu Dragnea, presidente del Partido Social Demócrata, del Parlamento y auténtico hombre fuerte del Ejecutivo, durante un discurso ante militantes de su formación, informa hoy el diario Adevarul.
Dragnea criticó que Bruselas mantenga el mecanismo de cooperación y verificación impuesto a Rumanía y Bulgaria cuando los dos países entraron en la UE en 2007, para ayudarlos a subsanar las deficiencias en sus sistemas judiciales y en la lucha contra la corrupción.
El líder socialdemócrata aseguró que hay otros Estados miembros de la UE “mucho más corruptos” y no reciben críticas de Bruselas.
Polémica ley para amnistiar a los corruptos
Durante el acto del partido, Dragnea reclamó que se adopte de forma urgente la planeada ley de amnistía e indulto que podría beneficiar a políticos acusados o condenados por corrupción, como él mismo.
De hecho, Dragnea no puede ser designado primer ministro por una condenada por fraude electoral y está pendiente de que se resuelva un recurso sobre otra sentencia condenatoria por abuso de poder.
El anuncio de esa amnistía ha provocado numerosas manifestaciones populares de rechazo y la crítica de la Unión Europea.
Por su parte, la primera ministra, Viorica Dancila, estrecha colaboradora de Dragnea, se declaró ayer proeuropea convencida pero exigió a Bruselas que respete a Bucarest.
“Debemos defender el país con dignidad. Deseo una Rumanía digna donde los rumanos sean tratados con respecto”, declaró.
Rumanía asumirá el próximo 1 de enero durante seis meses la presidencia de la Unión Europea.
Fuente: Euro Efe/ Raúl Sánchez Costa