SANTO DOMINGO. – La semana pasada República Dominicana ratificó que la reapertura del Turismo se mantiene para el próximo miércoles de julio, tras un consenso con los principales representantes del sector, en el que se suscribió un protocolo sanitario que incluye a los restaurantes que se encuentran dentro de los hoteles.
Sin embargo, la resolución ha generado incertidumbre entre los propietarios de locales gastronómicos, puesto que el referido protocolo no contempla estos establecimientos, pero tampoco define si la reapertura les atañe a todos.
Una fuente de entero crédito manifestó a El Nuevo Diario que, durante las conversaciones entre las autoridades sanitarias y la Asociación de Hoteleros (Asonahores), no se definió si el reglamento de salubridad sólo incluiría los restaurantes dentro de complejos hoteleros.
Esta postura sería una especie de salvoconducto para los dueños de negocios de comida que a partir del próximo miércoles decidan abrir sus locales y que no podrán ser sancionados puesto que el presidente Medina no pidió la extensión del estado de emergencia, que avala al Gobierno para restringir o suspender el ejercicio de algunos derechos ciudadanos como el libre tránsito o la libertad de reunión.
“No se definió y se entendió que los protocolos aplicaban a restaurantes fuera de hoteles, pero al final no hay una respuesta objetiva sobre esto”, indicó la fuente.
En lo que el panorama se aclara, desde hace cuatro meses cientos de empresarios del sector culinario han tenido que reinventarse, conformarse con el ya habitual “delivery o take-out”, e incluso clausurar establecimientos que llevan décadas de historia en el paladar dominicano.
Por su parte, tras un encuentro con miembros de Asonahores, el ministro de Turismo, Francisco Javier García sostuvo que “con este protocolo aseguramos que quienes nos visiten puedan disfrutar al máximo de nuestros centros turísticos y gocen de la mayor garantía de salubridad”.
El turismo supone cerca del 7 % del Producto Interior Bruto (PIB) de la República Dominicana, genera unos 300.000 empleos directos y el doble de indirectos.
El sector se paró por completo desde que el Gobierno decretó el cierre de fronteras por el COVID-19, el pasado 19 de marzo, y solo se reactivará a partir del 1 de julio.
No obstante, el Gobierno ha frenado el plan de desescalada y no ha autorizado el pase a la fase 3, como estaba previsto el pasado 17 de junio, por el aumento de los contagios.
Fuente:El Nuevo Diario
Loading ...
