Por: Lic. Fernando Núñez
Bachelof of US Legal Studies in Inmigration
Dinero-Complicidad-Fracaso.
Ningún cronísta, comentarista o medio de comunicación ha hecho opinión sobre el tema del alza de los precios o de lo que cobra cada artísta en sus presentaciones.
Nos preguntamos porqué Anthony Santos, por decir un nombre entre muchos, tiene ya más de 6 años sin hacer una actividad en Constanza o Jarabacoa, por solo citar dos pueblos.
Esto se debe expresamente a los exorbitantes precios que piden por sus presentaciones, los cuales son irrecuperables desde el punto de vista lógico o de lo que es un negocio. Por el “El Bachatú” están pidiendo la suma fría de US$100,000.00 (cien mil dólares), casi 6 millones de pesos, lo que sumada la publicidad sobrepasa esa cifra.
Respecto a “El Alfa”, según los medios cobran casi US$40,000.00 (cuarenta mil dólares), y de esa misma forma podemos citar que Wason ha subido a RD$600,000.00 (seiscientos mil pesos), Toño Rosario vale ya un Millón de pesos, entre otros precios absurdos.
Destacar que estos han encontrado “grandes emprendedores” capaces de perder lo que sea, pues eso no importa, dicen que perdiendo se gana. Además, de estrategas mercaderes que son los supuestos managers cuyas ganancias son porcentuales, no importa quien contrate, lo importante es el porciento que se han de ganar.
Es irracional pensar que en Jarabacoa, por ejemplo, estas sumas se sacan en las puertas, ya que el costo de boletas, en el mejor de los casos, es entre 800 y 1500 pesos por cada persona, o sea, que para sacar el dinero de cualquiera de estos el empresarios del espectáculo el contratante debe recibir a más de mil personas para ver a Toño o a Wason, y en el caso de Anthony Santos o El Alfa debemos hablar de varios miles de asistentes.
Existen venue y discotecas que no entendemos como sacan esas sumas económicas en lugares que su capacidad es de 400 o 500 personas y aveces la entrada es hasta gratis.
Los artístas, muchos de ellos, no todos, porque siempre hay excepciones, Hector Acosta, Sergio Vargas, Luis Vargas, entre otros, tienen por meta seguir conectados con su publico, sentir el calor de cada uno y que tengan la oportunidad de verles cada cierto tiempo, a diferencia de muchos que se convierten en cómplices de negocios los cuales no le vemos ni piés, ni cabeza.
Desde aquí el llamado a estos artistas: cobren dependiendo la convocatoria que ustedes tengan en el pueblo donde harán la presentaciones, cobren por la capacidad del lugar y lleguen a acuerdos con los promotores serios y de background, no se alejen de sus raices, no sean cómplices de muchos que perdiendo ganan.
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