Perito dejó establecido que se hicieron múltiples llamadas telefónicas a personas citadas con relación al crimen
La presidenta del Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís, María de los Ángeles Concepción, aplazó para el próximo 17 de octubre el juicio de fondo que se sigue contra Marlon Martínez y su madre Marlin Martínez, acusados de ser los responsables del asesinato de la adolescente Emely Peguero, quien tenía cinco meses de embarazo.
La magistrada tomó la decisión luego de escuchar los testimonios los padres de la menor asesinada, de testigos del caso, como María Balvina Rodríguez Santos, una de las empleadas de Marlin Martínez y también la versión de la doctora Anny Lissette Taveras, quien atendió a Emely.
Sobre las declaraciones de María Balbina, empleada de Marlin, el abogado de la familia de Emely, José Hoepelman manifestó que sus incoherencias al declarar son tácticas de desvió del caso, pero que los abogados del Ministerio Público tuvieron “la habilidad de que no se desviara”.
Ingrid Hidalgo, abogada de Marlin, ratificó que su defendida no tuvo participación en la muerte de la menor, y que “en su momento se establecerá qué fue lo que en realidad hizo”, lo cual asegura no es para involucrarla.
Dijo que sus testigos principales no los ha podido presentar a una la sacaron del país, refiriéndose a la abuela de Emely, quien se encuentra en Europa y otra persona, que no identificó, quien le ha manifestado temor de presentarse en el tribunal.
Testimonio del perito
En la audiencia, el perito de la Policía Nacional que investigó el proceso de las llamadas realizadas por Marlon y su madre Marlín Martínez, en torno a la muerte de la adolescente Emely Peguero, dejó establecido que se realizaron múltiples llamadas telefónicas a una gran cantidad de las personas que fueron citadas con relación al asesinato.
El técnico Danny Fernández se presentó al tribunal con un pliego de 106 páginas en las cuales se establecen las personas que fueron llamadas por Marlon y su madre durante el proceso de búsqueda de la menor, tras aparentar que se encontraba con vida.
De acuerdo con las informaciones presentadas por el investigador policial, el día en que murió Emely Peguero, Marlon Martínez llamó a su madre en horas de la tarde y luego se inició un proceso de llamadas a otras personas ligadas a su entorno familiar, entre lo que se encuentra su tío Henry Martínez y Bolívar Ureña (El Boli), así como otras personas a quienes les habrían informado de la situación presentada por la muerte de Emely Peguero.
Según las informaciones electrónicas del proceso de investigación dado por el técnico Fernández al tribunal, Marlon llamó a su madre Marlín en horas de la tarde para comunicarle lo ocurrido. Se estableció que de la celda telefónica se realizaron un total de 48 llamadas, además de las que se le hicieron a Bolívar Ureña.
El proceso de la investigación realizado por los organismos de la policía científica que designo al perito Danny Fernández, estableció que las llamadas se realizaron desde las comunidades La Amarga, Controba, El Pino, La Vega Bonao y Cenoví, Villa Tapia, además de otros lugares cercanos a donde vivía Emely Peguero.
Los técnicos policiales también realizaron las investigaciones de las llamadas al teléfono de Emely Peguero, adema de otras personas que podría haber tenido informaciones de lo que se produjo tras la muerte.
Emely Peguero tenía 16 años y cinco meses de embarazo cuando la mataron. El cuerpo de la adolescente presentaba señales de un aborto, probablemente forzado, y ruptura craneal. Por la brutalidad, este caso conmocionó al país. Durante la búsqueda del cuerpo de la menor se encontraron los cadáveres de otras dos jóvenes, las dos de 18 años. Una de ellas había sido asesinada por su padrastro y la otra por su novio y un cómplice de éste, lo que puso aún más en evidencia la gravedad de los asesinatos de mujeres en el país.
“Emely estaba feliz con su embarazo”
Adalgisa Polanco, madre de Emely Peguero, declaró que su hija estaba feliz con su embarazo y que hasta le había escogido el nombre al niño que esperaba producto de su relación con Marlon Martínez.
“Después que se descubrió que ella estaba embarazada, ella estaba feliz. Hasta el nombre el nombre se lo puso. Jacob Moisés, ese era el nombre que ella le tenía a su hijo”, dijo Polanco ante el Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís, donde ayer continuó el juicio de fondo contra Marlon y Marlin Martínez por la muerte de Emely.
Expresó que la relación entre Marlon y su hija era como la de todo adolescente. Señaló al principio tenían amistades de infancia ya después se convirtieron en novios, cuando Emely tenía 12 años.
Mientras Adalgisa Polanco narraba, Marlin estalló en llanto y Marlon agachó la cabeza colocándose las manos encima. La madre de la víctima dijo que fue Marlin fue quien le comunicó que Emely estaba embarazada de su hijo.
Se opuso al noviazgo de su hija con Marlon
Genaro Peguero, padre de la adolescente Emely Peguero, declaró que nunca estuvo de acuerdo con el noviazgo de su hija con Marlon Martínez. En ese sentido, negó las declaraciones ofrecidas por Marlon ante el tribunal, quien dijo que la relación que mantenía con Emely era con consentimiento de su padre. Al hablar ante el Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís, Peguero expresó que incluso le prohibió a su esposa, Adalgisa Polanco, que recibiera a Marlon Martínez en su casa. “Yo le prohibí a Adalgisa que lo recibiera en mi casa ( Marlon), porque yo se la calaña que era”, expresó Peguero, tras asegurar que “yo sabía para lo que Marlin daba y de lo que era capaz”, razón por la que se oponía a la relación de Marlon y su hija. Peguero entiende que Marlin cometió un delito al llevarse a su hija a casa de la señora “Liberata” (María Balvina Rodríguez Santos) para practicarle una prueba de embarazo sin que la tercera fuera enfermera. Criticó que Marlin fue capaz de decirle que su hija iba a aparecer y de salir en televisión diciendo: “¡Emely aparece, te estamos esperando!”.
Fuente: El Caribe