Cuando mediante el decreto número 121-13 el Poder Ejecutivo creó la Mesa Nacional Sobre Seguridad, Ciudadanía y Género, con la misión fundamental de propiciar y gestionar la ejecución de las políticas públicas y los programas sobre prevención de violencia y criminalidad, que a su vez fomenten la convivencia pacífica entre moradores de las comunidades definidas en sus planes de trabajo. Estaba convencido de que este factor de la violencia era la oveja negra de nuestra sociedad y que había que enfrentarlo de manera directa y sin vacilaciones. ¡Por tanto, puso manos a la obra!
Estas mesas, tal y como lo establece el mismo decreto, estarán compuestas por las instituciones del Gobierno Central, los Gobiernos Intermedios, los Gobiernos Locales y la Sociedad Civil Organizada. Todo fue presentado al país con un Plan Nacional de Seguridad y explicando a la ciudadanía que todas estas instancias son oportunidades para la participación colectiva de la sociedad. Para mantener un diálogo constante que nos permita trabajar juntos con las comunidades. Se trata de vincular a los distintos actores activos a la búsqueda de crear una cultura de paz a nivel nacional y con la participación de todos y todas sin distingos ni privilegios.
La Mesa Nacional sobre Seguridad, Ciudadanía y Género será coordinada por el Ministerio de Interior y Policía y estará compuesta por el o la presidenta de la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU) o su representante, un o una representante del Ministerio de la Mujer, un o una representante del Ministerio Público, otro representante de la Policía Nacional y dos representantes de las organizaciones civiles. Y por su lado, las Mesas Locales que funcionarán en los municipios, serán creadas por una representación del Ministerio de Interior y Policía, coordinada por el alcalde o alcaldesa, el gobernador o gobernadora como gobierno intermedio, un representante del Ministerio Público, otro de la Policía Nacional y dos representantes locales de la sociedad civil debidamente organizada y organismos no gubernamentales.
Las Mesas Locales de cada municipio deberán presentar un informe trimestral a la Mesa Nacional sobre el seguimiento y la gestión de la implementación de políticas y programas de prevención de violencia y criminalidad en las comunidades. La Mesa Nacional de Seguridad, Ciudadanía y Género unificará los informes de las Mesas Locales, destacando los programas y proyectos de mayor impacto en la inclusión. El Ministerio de Interior y Policía será siempre el encargado de coordinar la Mesa Nacional y las Mesas Locales de Seguridad, a fin de garantizar la interacción e intervención en acciones de prevención y fortalecimiento de la Seguridad Ciudadana.
En los últimos días se ha visto un activismo importante del Ministerio de Interior y Policía y algunas gobernaciones provinciales articulando estas Mesas en diversos territorios que han venido siendo resaltados por las estadísticas como los más afectados por el terrible mal de la violencia y el crimen organizado en todas sus manifestaciones. La seguridad no es solo un espacio de tranquilidad y de paz en el sentido más extremo de la palabra. Más que eso, la seguridad implica, tener garantizados cosas tan importantes como: alimentación, energía eléctrica, suministro de agua potable, trabajo digno para la población, educación de calidad, oportunidad de empleos para la juventud, así como otros factores más que te permiten convivir en franca paz junto a todos los tuyos y tener ciertas garantías sociales y económicas con las mismas posibilidades que otros sectores de la sociedad.
Los exponentes y motivadores para la conformación de estas mesas se enfocan en señalar como ejemplos positivos las ciudades como Bogotá que hace algunos años era definida como una de la más violentas del continente americano y ahora esa una de las seguras y con menor índice de violencia de la región. Se trata de prevenir y educar mas, para así tener que corregir y reprimir menos. Es como darles la participación a todos los ciudadanos y hacer que cada hombre o mujer entienda que ellos son parte de la solución para erradicar este problema que afecta a todos.
Felicitemos las autoridades civiles y militares por la iniciativa de retomar y reactivar estas mesas de seguridad que tanta falta hacen en nuestros territorios. Hagamos de ellas nuestros espacios de educación y participación local. La violencia nos afecta a todos, por tanto la lucha por la creación de una cultura de paz en nuestras comunidades es también tarea de todos y todas.
Por: Jesús Belén de la Cruz
