Santo Domingo.- La senadora del Distrito Nacional, Faride Raful, emitió varias declaraciones a través de twitter, a raíz de las acusaciones que ha recibido el ministro de la Presidencia, Lisandro Macarrulla, luego de que en el expediente de “Operación Medusa” la empresa de su familia resultara como una de las beneficiadas en las licitaciones para la construcción de la cárcel La Nueva Victoria.
Ayer, el funcionario denunció que los cuestionamientos a su persona son parte de una campaña de difamación en su contra.
La senadora inició una serie de declaraciones, resaltando que, “cuando usted tiene que tergiversar información es porque se queda sin argumentos. En esta época es más peligroso porque se desinforma en vez de informar. Pero claro, eso sólo se hace aviesamente. Gente que se dedica a eso y ya sabemos dónde están. La historia les guarda un lugar”.
Siguiendo la misma línea, señalo: “la doble moral la tienen quienes ahora levantan su voz, cuando mantuvieron silencio durante tanto tiempo, azuzando impunidad. Por primera vez el Congreso lleva a funcionarios a ser interrogados, sólo hay que solicitarlo. Contrario a lo que era antes”.
Dejó claro que contratar con el Estado no es ilegal. Lo ilegal se da cuando esas contrataciones se dan a través de sobornos o son sobrevaluadas y cuando se disfrazan procesos de licitación para beneficiar de manera irregular a alguien en específico.
La legisladora oficialista recordó la contratación realizada por el gobierno de Danilo Medina a Joao Santana y su esposa Monica Moura, señalando que fue una contratación ilegal, donde se violentaron procesos establecidos por ley. Entiende que los ex ministros que se encargaron de estas contrataciones deben ser investigados en base a qué o cómo realizaron las mencionadas contrataciones.
Sin embargo, sin restar la veracidad a la teoría de la “campaña de descrédito”, la senadora por el Distrito Nacional, Faride Raful, entiende que el ministro también debe explicar al pueblo dominicano bajo qué circunstancias su empresa logró la adjudicación en la controversial obra.
Finalmente, manifestó, “si lo que tratan algunos es de infundir temor, no pierdan su tiempo. Quien hace lo correcto, dispone de la tenacidad necesaria para hacer que las cosas sean posibles. Sus ruidos y chantajes no detienen el camino de quien construye pensando en colectivo, en el País que merecemos.
Por: Lourdes Gómez
